En un desarrollo sin precedentes en el caso de la presunta compra de votos en Colombia, la Corte Suprema de Justicia ha emitido una orden de captura internacional contra el exsenador Arturo Char.

Esta decisión surge en el contexto de las investigaciones en curso relacionadas con un supuesto acuerdo delictivo de compra de votos en el departamento de Atlántico para el año 2017, en el cual también se ha mencionado la implicación de la condenada exsenadora Aida Merlano Rebolledo.

Dicho concierto delictivo habría ido más allá de un simple convenio político, en la medida en que, supuestamente, para conseguir la elección de Aída Merlano Rebolledo en el Senado; de Lilibeth Llinás Delgado en la Cámara y la propia reelección de Arturo Char Chaljub en el Senado, se habrían ejecutado delitos contra los mecanismos de participación democrática, a través de la compra de votos para estos tres candidatos.

Las pruebas presentadas ante la Corte Suprema incluyen comunicaciones interceptadas, testimonios y registros financieros que sugieren la participación de Arturo Char en el presunto acuerdo delictivo.

Frente a estos hechos, el implicado se pronunció a través de su cuenta de X, diciendo que: «siempre he sido respetuoso de las actuaciones de las autoridades judiciales y y por esa razón nunca he debatido los pormenores del caso en medios públicos».

Y añadió: «he ejercido mis derechos y continuaré haciéndolo hasta demostrar mi absoluta inocencia. Las mentiras de la señora Merlano tarde o temprano se pondrán en evidencia no solo ante mis jueces sino ante la opinión pública«.

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