El brigadier general Ricardo Roque, habló sobre los desafíos en materia de seguridad tras asumir el mando de la Cuarta División

A lo largo de su carrera, ha comandado unidades como el Batallón de Contraguerrillas N.° 54 “Agustín Calambazá”, la Brigada Especial de Ingenieros Militares, el Centro Nacional de Entrenamiento y el Comando Específico de Norte de Santander, entre otros.

Con más de tres décadas de servicio a la Nación, el brigadier general Ricardo Roque Salcedo asumió recientemente el mando de la Cuarta División del Ejército Nacional, unidad encargada de mantener la seguridad y el control institucional del territorio en los departamentos del Meta, Guaviare y Vaupés.

Es profesional en Ciencias Militares e Ingeniero Civil de la Escuela de Ingenieros Militares (ESING), y cuenta con especializaciones en Gerencia Integral de Obras, Conducción de Unidades Militares, Relaciones y Negocios Internacionales, y Seguridad y Defensa Nacional, además de una sólida formación complementaria en derecho internacional humanitario, combate al terrorismo y alta dirección empresarial.

El brigadier general Roque Salcedo (R.R.) conversó con Periódico del Meta (PDM) sobre los principales desafíos que enfrenta la región en materia de seguridad: la presencia de grupos armados organizados, las economías ilegales y el fortalecimiento del trabajo conjunto con la comunidad y las instituciones. En esta entrevista, el alto oficial expone sus prioridades al asumir el cargo y el compromiso de las Fuerzas Militares por garantizar la tranquilidad y el desarrollo de los Llanos Orientales.

Por Lina Herrera

PDM: Bienvenido a los Llanos. ¿Qué territorios cubre la Cuarta División?

R.R.: Recibí, de la mano de Dios y del mando institucional, la Cuarta División del Ejército Nacional. Es una división conformada por hombres y mujeres decididos, encargados de apoyar los temas de seguridad en los departamentos del Meta, Guaviare y Vaupés.

PDM: ¿Cuánto tiempo lleva laborando en el Ejército?

R.R.: Voy a completar 36 años en la institución.

PDM: ¿Antes había trabajado en esta zona?

R.R.: No, es la primera vez que soy destacado en este sector del país, pues anteriormente he estado en condiciones diferentes de Estado Mayor, revistas… Soy oficial de ingenieros. En algún momento hice parte de la Fuerza de Tarea Omega, en la región de La Macarena, pero como comandante de un batallón destacado allá. Hoy en día, los designios de mi Dios y del mando institucional me permiten ser comandante en esta importante región del país.

PDM: ¿Qué expectativas tiene ante este nuevo cargo?

R.R.: Vengo con muchas expectativas para cumplir la misión de la mejor forma posible, como lo han hecho mis antecesores, y siempre desde los lineamientos institucionales y del Comando del Ejército Nacional. La idea es seguir avanzando día a día en mejorar las condiciones de seguridad de este importante departamento y de esta importante región.

PDM: ¿Cómo recibió la Cuarta División?

R.R.: Estoy en un proceso de recibir información operacional, social y estratégica, propia de la División del Ejército. Creo que, con el trabajo mancomunado que se ha venido realizando, se han obtenido algunos resultados. Hoy es una oportunidad para presentarme y ponerme a disposición de esta comunidad llanera.

Posteriormente hablaremos de resultados, pero continuaremos con la misma dinámica de operaciones para seguir obteniendo logros, enfrentando las amenazas y las economías ilegales, que es lo fundamental para devolver la tranquilidad y mejorar las condiciones de seguridad de sus habitantes.

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PDM: ¿Cuáles son los delitos que más aquejan a esta región y que usted debe enfrentar?

R.R.: Las economías ilegales, la extorsión, el secuestro y el narcotráfico. Son temas que diariamente están en la agenda, y los estamos enfrentando decididamente. ¿Por qué? Porque sabemos que ese es el caldo de cultivo que alimenta a todo este tipo de organizaciones al margen de la ley.

PDM: En el Guaviare se han presentado casos en los que algunos militares han sido retenidos por la población civil. ¿Cómo reacciona usted ante esto?

R.R.: Tenemos lineamientos institucionales para estos casos particulares. Existen análisis sociales que se deben realizar, como ha ocurrido en diferentes partes del país, entre ellas el Guaviare. Estamos analizando, desde el orden legal y operacional, cómo mitigar esta situación que se ha presentado en varias regiones.
Lamentablemente, usan a nuestros campesinos, los instrumentalizan y los ponen en contra de las instituciones debidamente creadas y establecidas por la Constitución.

PDM: ¿Cómo hacerle frente a la extorsión, que también se ha presentado mayormente en el sur del Meta?

R.R.: Es fundamental la denuncia. Creo que es el paso más importante para enfrentar este tipo de problemáticas de seguridad. Tenemos una línea de denuncia, la 147, que está abierta de manera permanente.

También recuerdo que la seguridad es responsabilidad de todos: no solamente de las Fuerzas Militares, de la Policía Nacional o de las instituciones de seguridad y los gobernantes, sino de toda la ciudadanía. Todos podemos participar en la seguridad, y una información oportuna y veraz puede ayudarnos a prevenir la materialización de cualquier amenaza.

PDM: ¿Qué decirle a la población que teme denunciar por miedo a represalias?

R.R.: Precisamente por eso se crean estos canales o líneas que son totalmente abiertas. Cualquiera puede denunciar. Muchas veces existe la estigmatización de acudir a una unidad, a una institución de seguridad o judicial. Hoy, gracias a los medios de comunicación, se pueden hacer denuncias que serán bien recibidas. En muchos casos no se solicitan los datos personales; solo con la información se activa el personal encargado del seguimiento, lo que permite evaluar y tomar acciones oportunas. La idea es denunciar antes de que ocurra el hecho. Después de que sucede, no tiene sentido decir: “yo había visto”, “yo había pensado”, porque ya no hay nada que hacer.

PDM: ¿Cuáles son los grupos armados organizados con mayor presencia en la región?

R.R.: Tenemos identificado que existen disidencias y, posiblemente, alguna estructura del Clan del Golfo. Los tenemos ubicados y estamos trabajando en su contra, así como en contra de las economías ilegales que los alimentan permanentemente.

PDM: Usted recibe el cargo y ya se registra una afectación al Frente Armando Ríos, en Calamar, Guaviare…

R.R.: Es un seguimiento judicial que se viene adelantando. Siempre trabajamos de manera interinstitucional con la Policía Nacional y con otras entidades de seguridad. Se tenían los indicios correspondientes; nosotros somos articuladores y hacemos parte del proceso que se evidenció allá. Son los organismos de seguridad y judiciales los que toman las decisiones, y serán los jueces de la República quienes determinen la culpabilidad o no de estas personas.

PDM: ¿Qué mensaje envía a los llaneros?

R.R.: Quiero hacer una invitación a los jóvenes que deseen tomar la decisión de pertenecer a la institución militar. Están abiertas las puertas para ser oficial, suboficial o soldado. Muchos estigmatizan el servicio militar, pero es una oportunidad de vida: una experiencia que forma a las personas y les permite valorar lo que tienen. Es también una oportunidad de crecimiento personal y profesional.
Para el público en general: voluntad de servicio, puertas abiertas del Comando de la Cuarta División, y el compromiso de seguir colaborando día a día para mejorar las condiciones de seguridad y tranquilidad en esta importante región del país.