Armarse o no, he ahí el dilema

En diciembre de 2022, el Gobierno Nacional prorrogó por un año la suspensión de permisos para el porte de armas de fuego.

Por Catalina Gallego

El porte de armas para defensa personal es un tema que ha cobrado relevancia. Mientras en Estados Unidos algunos buscan regularizarlas por los tiroteos fatales en ese país; en Ecuador, recientemente, su presidente anunció la autorización para portar armas como nueva medida contra la delincuencia.

Colombia no se queda atrás, pues uno de los alcaldes del Atlántico, pidió al Gobierno Nacional levantar la prohibición de porte de armas en el país, por la ola de inseguridad.

El senador del partido de la U, José David Name, dijo estar de acuerdo con armar a la población civil: “ante la inseguridad que tiene este país sí deberíamos dejar armar a los comerciantes que están siendo extorsionados por estas bandas criminales”.

En el Meta, esta postura también ha sido acogida fuertemente por la extorsión que viven comerciantes y ganaderos del departamento, ya que frecuentemente se registran víctimas por estos delitos, llegando al asesinato de algunas de ellas.

El presidente de la Junta Directiva de la Cámara de Comercio de Villavicencio, Henry Palma, ha hecho pública su opinión acerca de que las “autoridades tienen que viabilizar la tramitología para que algunas personas puedan adquirir un arma, y no para atacar a nadie sino para su defensa propia, porque el arma tiene que entenderse en ese sentido”.

De igual manera, Eduardo Arias, gerente del Comité de Ganaderos del Meta, insistió en la necesidad que tienen de usar un arma, únicamente como medida de seguridad, pues cabe mencionar que, hasta febrero de este año, se registraron más de 10 casos de abigeato en el departamento.

“Nosotros siempre hemos sido partidarios de tener armas para defensa personal porque históricamente el sector ganadero ha sido muy afectado por la violencia”, dijo Arias.

Añadió que “no tenemos ninguna razón que demuestre que nosotros somos delincuentes y que buscamos con las armas cometer delitos y asumir otras actividades diferentes a la de nuestra seguridad”.

Por el contrario, hay quienes creen que esta no es una medida adecuada para garantizar la seguridad de las personas o que podría contemplarse como última instancia, pues aseguran que el deber es de la Fuerza Pública.

“Pienso que permitir eso es abrir muchas puertas, es un tema de difícil control. Digamos que eso sería una última instancia y pensaría que lo que se debe tratar de hacer es fortalecer la Fuerza Pública, eso sería lo ideal porque son ellos quienes realmente deben defender a la comunidad y a los comerciantes”, indicó Jorge Arango, director de Fenalco Meta.

Aunque, en diciembre de 2022 el Gobierno Nacional prorrogó por un año la suspensión de permisos para el porte de armas de fuego en territorio colombiano, por medio del decreto 2633 del 30 de diciembre de 2022, aún hay ciudadanos que deciden portarlas de manera ilegal.

En lo que va del 2023, en el departamento del Meta se han incautado armas ilegales. Al respecto, el coronel Jeison Sora, comandante de la Policía Departamento Meta, insistió a las personas que van a adquirir un arma, hacerlo de forma legal.

“Hay algunas personas que tienen algunos permisos especiales, esto está de acuerdo al departamento de Control Comercio de Armas Municiones y Explosivos, y también por parte de las brigadas se hacen los análisis y verificaciones. En ese sentido, solicitamos a la comunidad del departamento que si piensan adquirir algún tipo de armamento, lo hagan de manera legal con la Industria Militar Colombiana y cumplan con todos los requisitos que están establecidos por Ley”, precisó el coronel.

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