Gobierno confirma ausencia de Iván Mordisco en mesa de negociación

El proceso de paz entre el Gobierno y el Estado Mayor Central (EMC) ha experimentado un giro significativo con la confirmación de que Iván Mordisco, el máximo líder de ese grupo armado, no está participando en las negociaciones. Esta revelación, anunciada por Camilo González Posso, jefe negociador del Gobierno, refleja una profunda división dentro del EMC, donde algunas estructuras han optado por seguir adelante con el proceso de paz, mientras que otras han abandonado la mesa debido a discrepancias sobre la estrategia a seguir tras la suspensión del alto al fuego regional.

La fractura en el EMC se hizo evidente con la suspensión del alto al fuego regional, decretada por el presidente Gustavo Petro el 17 de marzo. Mientras que algunos delegados del EMC abogaban por mantener el alto al fuego y avanzar en más acuerdos parciales, otros abogaban por medidas más radicales. Esta divergencia culminó en una reunión extraordinaria en el Caguán el pasado 5 de abril, donde figuras clave como Alexánder Mendoza y Andrey Avendaño se pronunciaron a favor de continuar con el proceso de paz, a pesar de la ausencia de Mordisco en la mesa de negociación.

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Aunque la ausencia de Mordisco representa un desafío para el proceso de paz, González señala que la mesa continuará con el Bloque Jorge Suárez Briceño y el de Magdalena Medio, que representan aproximadamente el 40% de los hombres del EMC. Sin embargo, el restante 60% se encuentra fuera del diálogo en este momento. A pesar de esto, González no descarta la posibilidad de retomar conversaciones con este sector en el futuro, aunque actualmente las conversaciones están “congeladas” y no se han establecido condiciones para negociaciones por fuera de la mesa.

“En este momento están congeladas las conversaciones y no se han configurado condiciones para hablar de nuevos diálogos por fuera de la mesa. Solo tenemos un proceso, con quienes están en el cese al fuego y respetando los acuerdos firmados”, indicó González a El Espectador.

El próximo ciclo de conversaciones entre el Gobierno y los frentes del EMC que permanecen en la mesa está programado para junio, aunque se está considerando cambiar la sede originalmente prevista en Ocaña, Norte de Santander. Esta evolución en el proceso de paz subraya los desafíos persistentes que enfrenta Colombia en su búsqueda de una paz duradera y la complejidad de negociar con grupos disidentes que operan dentro del país.