Los desafíos de las 33 corporaciones ambientales reunidas en el Meta

Desde ayer miércoles, 33 directores de igual número de corporaciones ambientales del país se reúnen en el Meta  con el fin de firmar pactos y alianzas que ayuden a preservar el bioma amazónico y defender el medio ambiente en las diferentes regiones.

Justamente, este jueves Asocars suscribirá en Puerto Gaitán la alianza por la ‘Amazonia Viva’ con la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo (USAID) y un acuerdo con la Agencia Aviatur para promover la ‘Ruta Colombia, encanto ambiental’. Así mismo, presentará el trabajo desarrollado en diferentes regiones del país entre las Corporaciones Autónomas y la Brigada de Desminado Humanitario.

Olga Lucía Alfonso, vicepresidente de la Asociación de Corporaciones Ambientales Regionales (Asocars), indicó a Periódico del Meta, que en esta asamblea anual además de elegir la nueva junta directiva de la agremiación, la intención es revisar las herramientas de articulación con el Gobierno Nacional. 

“Además de la asamblea, en estas reuniones se firmarán varios pactos y se han conformado comisiones regionales de educación ambiental y alianzas de lucha contra la deforestación, teniendo en cuenta que el Meta es uno de los departamentos con más alta tasa de tala de árboles”, indicó Alfonso, quien también es la directora de la Corporación Ambiental del Tolima (Cortolima).

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Para el consultor y experto en planeación de proyectos , Nelson López, esta asamblea debería tener una serie de desafíos de cara a la crisis climática.

“El impacto del cambio climático y la deforestación, por ejemplo, traspasan las fronteras de las corporaciones. El material particulado proveniente de las regiones deforestadas se desplaza con el aire y agrava la contaminación de las ciudades. Esta cadena de contaminación exige, al menos, la cooperación entre las corporaciones. Para no hablar de inundaciones e incendios forestales. También es imperativo un nuevo modelo de gestión de los institutos de investigación, Humboldt y Sinchi, que son el brazo tecnológico y científico de las corporaciones, y que deben inmiscuirse más en la problemática específica y asuntos ambientales pertinentes de los territorios, con mayor descentralización, transferencia de tecnología y una cooperación más efectiva”, explicó López.

Además sugirió que para garantizar los recursos para el control de la deforestación, valdría la pena considerar un fondo de financiamiento forestal para el pago de servicios ambientales, financiar el aprovechamiento sostenible de los recursos no maderables del bosque, reforestación, viveros forestales, negocios verdes, proyectos ecoturísticos, ciencia, extensión forestal y otros, que mejoren el bienestar social. “Una fuente de recursos de este fondo podría ser el ‘canje de deuda por naturaleza’, pagando deuda con proyectos financiados para la conservación de los bosques”, explicó.

A estos retos, se suma continuar en la senda de transformar la imagen deteriorada que tuvieron las corporaciones autónomas, señaladas de hechos de corrupción a costa de los recursos naturales.

La vicepresidente de Asocars admite que sí bien esto es cierto, las corporaciones han sido condenadas por dos o tres casos particulares de corrupción mediáticos, “los directores actuales hemos generado unas dinámicas actuales, unas condiciones distintas de trabajo y por eso los actuales directivos no tienen ninguna problemática”.

“Se desarrollan mecanismos para que las corporaciones sean cercanas a la comunidad y escuchar sus necesidades. Trabajamos en ser más eficientes y transparentes y por eso nos apoyamos en la tecnología para que las corporaciones cambien esa imagen”, dijo Olga Lucía Alfonso.

Para Nelson López, las corporaciones ambientales cumplen un rol estratégico en la agenda nacional e internacional del cambio climático y en la reactivación económica de las regiones. No solo como autoridades ambientales, función que también es de competencia de las alcaldías y otras instituciones.