sábado, 31 de mayo de 2025
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Aporofobia | Opinión


Aporofobia | Opinión 1
Donald Trump, presidente de Estados Unidos.
José Abelardo Diaz Jaramillo

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La orden del presidente de Estados Unidos de expulsar a cientos de migrantes, tratados indistintamente como delincuentes, ha puesto de presente los niveles crecientes de aporofobia que hoy se registran en el mundo. Valga recordar que el término, que traduce el miedo y rechazo al migrante pobre, fue acuñado por la filósofa española Adela Cortina en 1995, e incorporado como un neologismo, al diccionario de la Real Academia de Lengua Española, en 2017.

Sin duda, estamos asistiendo a un momento en el que es más común hallar representaciones negativas de grupos poblaciones en condiciones de vulnerabilidad. Las posturas antinmigración de Estados Unidos y las potencias europeas, signadas por un desprecio hacia el otro pobre, al que se responsabiliza de su desgracia y se equipara a una amenaza social, además de aumentar cada día, son un síntoma de la crisis del sistema capitalista mundial que pregona el individualismo y la competitividad, a la par que condena a contingentes humanos a la no-vida, al marginarlos de los circuitos de explotación laboral y de consumo.

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Ya, en 2018, el también presidente Trump, se había referido a Haití, El Salvador y a las naciones africanas como “países de mierda”, y, como si no fuese suficiente con el agravio, puso en duda la condición de humanidad de sus habitantes, equiparándolas a animales. Relatos supremacistas de esa estirpe, encarnan una visión racista y clasista de la sociedad, de la que se nutre un odio colectivo que recuerda, como en la película de Ingmar Berman (El huevo de la serpiente), lo que pueden desatar las persecuciones a grupos humanos por su origen étnico, geográfico o su condición sexual.

Al aldeano vanidoso que cree que el mundo es su aldea (al decir de José Martí), y puede ir maltratando a la humanidad a su antojo, hay que recordarle que la dignidad de los pueblos es una condición sine qua non para alcanzar el entendimiento respetuoso entre las naciones, lo que no es otra cosa que la paz mundial.


José Abelardo Diaz Jaramillo

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