Excombatientes y campesinos buscan abrir mercados en la Julia, Uribe

Estudiantes, campesinos, comunidad y excombatientes de la región encontraron un espacio para ofrecer los productos sembrados y procesados por ellos mismos.

Por Catalina Gallego / Especial Periódico del Meta 

Con un desfile de carrozas elaboradas por los estudiantes y docentes de la Institución Educativa La Julia, empezó la segunda edición de la Feria de Emprendimiento y Mercado Campesino en esta inspección de Uribe, al sur del Meta.

Esta iniciativa, nacida de los mismos alumnos del colegio, es un espacio creado para vender productos elaborados por ellos a base de lácteos, panela y harina de plátano. Entre los alimentos que comercializaron había limonada brasileña, arepa rellena, yogurt y envueltos, entre otros.

“Estas actividades son positivas porque uno puede notar que los chicos se interesan en hacer cosas diferentes a estar dentro del aula”, comentó Javier Rojas, docente de inglés, y quien también ve la importancia de darles nuevos espacios a los estudiantes. 

Además, los jóvenes no solo se interesan en crear sino también en producir, ya que el dinero recaudado podrá se utilizado para actividades que ellos quieran realizar, en el caso de los estudiantes de grado once, los ingresos serán destinados para la despedida de fin de año. 

Los campesinos que hacen parte del Programa Nacional Integral de Sustitución de Cultivos Ilícitos (PNIS), también tuvieron su lugar en esta feria para vender el producto de las cosechas. 

El objetivo del PNIS, programa creado en mayo del 2017, es promover la sustitución voluntaria de cultivos ilícitos, por medio de proyectos y programas para ayudar a las familias campesinas que obtienen su sustento de las mismas. 

José Antonio Linares, uno de los cultivadores que llegó desde la vereda Comuneros, a 20 minutos de La Julia, aprovechó para vender plátano, yuca, limón, chorizos y envueltos preparados por su esposa.

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“Llevamos 35 años sembrando diferentes productos, y coca, cuando se podía”, aseguró José, que bautizó a su finca ‘Brisas de la reserva’, y quien se apresura a aclarar que desde hace más de diez años acabaron con los cultivos ilícitos.

José y su familia hacen parte de los 9.668 hogares que en el departamento del Meta han sido beneficiadas con este programa de sustitución de cultivos, en el que según cifras oficiales, se han invertido 155.518 millones de pesos.   

Ahora, con la tranquilidad de trabajar desde la legalidad, José y su esposa venden sus productos a la misma comunidad y a los camioneros que llegan desde Bogotá. 

Diana Paola Martínez, una mujer campesina de 27 años que vive en su finca Agua Linda con sus padres y seis hermanos, también tiene ahora cultivos de aguacate, ahuyama y en algún momento sembró cultivos de coca: “Cuando comenzó la prohibición de cultivos, a nosotros nos dieron la opción de arrancar voluntariamente la coca; para eso ha habido muchas ayudas, dinero, herramientas, abonos y muchas cosas más”.

Como Diana, en su finca, más de 4.146 hectáreas están en proceso de sustitución voluntaria en el Meta, permitiendo que el 92 por ciento de las familias beneficiadas hayan implementado proyectos de pancoger, para garantizar sus alimentos diarios.  

Pero aunque la vereda de Diana se encuentra a miles de kilómetros de distancia de la guerra entre Rusia y Ucrania, en Comuneros han sentido los efectos de ese conflicto, ya que en las últimas semanas no han podido obtener las ganancias que solían, debido a la subida de los precios del abono.

“El producto del campesino lo compran por acá muy barato y los abonos están carísimos, entonces no es mucha la ganancia”, añadió la agricultora, quien valora por ello espacios como esta feria la de emprendimiento para vender sus productos.

Excombatientes

En el evento, mujeres excombatientes de la región también pudieron mostrar uno de los emprendimientos que ya lleva 18 meses en producción.

Se trata de una asociación de mujeres que transforma la leche en yogur y arequipe, cuyo proyecto busca mejorar la calidad de vida de las 20 excombatientes que la integran.

 “Conformamos la asociación buscando mejorar la calidad de vida de las excombatientes que vivimos en la Nueva Área de Reincorporación (NAR) Darío Gutiérrez”, indicó la vicepresidenta de la asociación, Daily Marín.

Estas mujeres además de hacer el proceso de transformación de los productos, los distribuyen y venden en diferentes escenarios, como han sido en las ferias de Villavicencio y Bogotá.

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