Ola invernal amenaza comunidades rurales y urgente atención

Comunidades rurales de Villavicencio y el Meta siguen clamando por atención ante la creciente amenaza de la ola invernal. En la vereda La Argentina de Villavicencio, la construcción de espolones en el río Guatiquía se vuelve una necesidad apremiante para 343 familias del corregimiento 3.

Según denunció José Ramón Moreno, vocero de la comunidad, «llevamos más de un año esperando las obras de la Gobernación del Meta, con unos diseños diferentes para buscar erradicar la problemática y poder estar tranquilos», evidenciando la decepción por la demora en las soluciones.

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La comunidad de La Argentina también señala la responsabilidad de los mineros que extraen material del río, exigiendo su colaboración en obras de descolmatación y piscinas para mitigar el impacto del material de arrastre que ya ha causado la pérdida total de viviendas para 28 familias.

Frente a esta situación particular, Juan Carlos Guzmán, director de la Oficina Municipal de Gestión del Riesgo, informó que la Gobernación del Meta está a la espera de la apropiación de recursos de regalías para iniciar la construcción de los espolones.

Guzmán añadió que, además de trabajar coordinadamente con la administración departamental en Villavicencio, se están realizando obras de respuesta en diferentes puntos de la ciudad, especialmente en ríos como el Guatiquía, Guayuriba y Ocoa, que presentan riesgos de socavación. Explicó que en varios puntos críticos el problema principal no son los riesgos de inundaciones, sino la socavación que desestabiliza muros.

El director de la DMGR también advirtió sobre la variabilidad climática como un factor clave, dificultando la predicción de periodos de lluvias intensas y sequías. «Tenemos capacidad de respuesta y esperamos que las obras aguanten, sin embargo hay que ser conscientes que en varios sectores de la ciudad, los habitantes coparon la capacidad hidráulica de los ríos, invadiendo sus rondas o metiéndose a sus afluentes», puntualizó Guzmán.

Por su parte, Luz Nelly Monzón Díaz, directora de la Dirección de Gestión del Riesgo del Departamento (DIGERD), había manifestado a principios de abril que la Gobernación del Meta priorizó 7 escenarios de riesgos, incluyendo inundaciones, avenidas torrenciales, incendios, remoción de masa, sismos, riesgos biosanitarios y cambio climático.

Destacó la existencia de 9 metas en el Plan de Desarrollo para mitigar los efectos de la temporada de lluvias en este cuatrienio, resaltando la adquisición de maquinaria amarilla, obras de reducción de riesgo en puntos críticos, fortalecimiento de la DIGERD y entidades operativas, capacitaciones, intervenciones correctivas y prospectivas, y estudios y diseños para obras en 8 municipios.

Monzón Díaz aclaró que si bien el Plan Estratégico abarca los 29 municipios del Meta, la atención se ha concentrado en los 9 que actualmente tienen calamidad vigente: Cubarral, El Dorado, El Castillo, El Calvario, Fuentedeoro, Granada, Puerto Lleras, San Carlos de Guaroa y Villavicencio. En cuanto al presupuesto, la funcionaria informó que para el 2025 se cuenta con 4.060 millones de pesos destinados a afrontar las situaciones generadas por la intensidad de la temporada invernal.