Un gamer llanero, en las grandes ligas

El villavicense Cristian Pinto es uno de los mejores jugadores internacionales de Fornite, este año busca competir presencialmente en la Fortnite Champion Series

A pesar de su juventud, Cristian Pinto o Criiizux como se le conoce en la plataforma de Fortnite, alienta a los jóvenes a seguir su pasión de jugar videojuegos como una profesión, pero sin dejar de lado los estudios.

Por Karol Villalobos

Aunque los videojuegos llevan consigo el estigma de ser distractores y una ‘‘pérdida de tiempo’’, lo cierto es que se convirtió en un campo profesional que cada vez se posiciona como uno de los más apetecidos por las nuevas generaciones.

Conocido en el ciberespacio como Criiizux, el villavicense de 18 años Cristian Pinto, se trasladó con su familia hace cinco años hasta San José, California, lugar donde floreció su pasión por jugar videojuegos. Hoy en día se posiciona entre los mejores del mundo en Fortnite.

Este es un juego competitivo de disparos en primera persona (FPS – First person shooter), el cual tiene diferentes modos de juego, pero el principal, es ser el último sobreviviente (Battle Royal) en una isla donde se pueden construir muros o paredes para defenderse de ataques enemigos.

Pinto ha jugado 300 torneos y en el 2021 quedó en tercer lugar en el ‘Fortnite Champion Series’, donde ganó un premio de más de 60 millones de pesos colombianos. En entrevista para Periódico del Meta, opinó que las personas que critican este oficio ‘‘deben ser un poco más abiertas mentalmente, se vienen tiempos en que la tecnología está abarcando todo, obviamente no hay que descuidar el futuro; esto lo inicié desde muy pequeño, por amor, pero yo nunca descuidé mis estudios, creo que hay que ser maduro para dedicar tiempo a ambas cosas’’.

Comentó con nostalgia que su pasión nació cuando vivía en Villavicencio en el barrio Bosques de Vizcaya, mientras todavía estudiaba en el colegio Nuevo Gimnasio: ‘‘todo esto se lo debo a mis primos porque desde pequeño me enseñan a jugar varias cosas, lo que a ellos le gustaba. Gracias a ellos adquirí esa pasión y pude transformarla en frutos’’.

Aunque es muy joven, tiene presente que la edad no es un factor decisivo para ser un jugador profesional: ‘‘yo siento que no es tanto la edad, sino cuánto tiempo lo lleves realizando, hay gente que todavía compite y sigue en los eSports (Deportes Electrónicos) con más de 20 y 25 años. Creo que es más que todo mental’’.

A su vez, explicó que es más difícil para los latinos ser profesionales en este campo en comparación con quienes viven en Estados Unidos, Europa o Asia, pero es algo que va más allá de las habilidades: ‘‘eso depende del juego, hay unos servidores en las zonas más cercanas de Latinoamérica. En el caso de Fortnite no hay servidores tan cercanos, por ende, es más difícil jugar de forma competitiva. Conozco gente que juega desde Colombia que le ha ido muy bien, pero siempre es mucho más difícil. Irme a Estados Unidos me sirvió a mí porque yo estaba acostumbrado a jugar a muy mala velocidad, el ping, varias desventajas, y cuando llegué allá, el juego era mucho más diferente’’.

Es decir, existen desventajas según la región en la que se encuentren los jugadores como la conexión a Internet. En pocas palabras, los servidores son un sistema que le permite a los usuarios emparejarse con otras personas en el mismo continente, con el objetivo de que ambos tengan un rendimiento óptimo y pueda considerarse equitativo.

Cristian afirmó que sus mejores momentos fueron en pandemia, pues estudiaba online y podida dedicarse un poco más a su pasión, ‘‘llegaba a jugar entre 7 u 8 horas, pero también utilizaba ese tiempo a la creación de contenido’’. Actualmente transmite sus partidas en Twitch, plataforma en la que tiene 279.480 seguidores.

Recientemente Pinto se graduó del higschool, su equivalente al bachillerato en Colombia, y también se prepara para trasladarse un mes a Texas con la finalidad de dedicarse de lleno este año al ‘Fortnite Championship Series 2024’ el cual promete terminar con un espectáculo presencial y tener más de 7.000 dólares en premios.