El Meta y la advertencia de una posible crisis alimentaria | Análisis

Los precios de los alimentos están alcanzando máximos históricos y la falta de fertilizantes provocaría escasez de comida.

Por Valentina Mejía

Hace una década se auguraba una crisis alimentaria mundial para el año 2030, debido a que la producción agrícola no alcanzaría a satisfacer la demanda. Sin embargo, la invasión de Rusia en Ucrania parece haber acelerado el fenómeno.

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De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y el Programa Mundial de Alimentos (PMA), la guerra en Ucrania ha exacerbado la inflación en los precios mundiales de los alimentos, lo que afecta la estabilidad económica en todas las regiones.

Por ejemplo, el precio de la urea se disparó hasta un 300 por ciento en el Meta, “por eso los agricultores están en la disyuntiva de reducir las dosis de fertilizantes, si es que los consiguen y pueden comprarlos; o no sembrar”, dijo Nelson López, columnista de Periódico del Meta.

Antonio Guterres, secretario General de la ONU, sostuvo que la crisis alimentaria que se está produciendo durante este año es “de acceso a los alimentos”, mientras que pronosticó que la del año que viene “podría ser por falta de alimentos”.

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Frente a esta problemática, Miller Ortiz, presidente del Comité de Fedearroz en Villavicencio, fue enfático al decir que no cree que haya hambruna en el departamento del Meta porque todavía hay dónde sembrar.

“Esta región es un área que es estable y no tiene para dónde más ampliarse en cultivos de arroz, maíz y soya, a menos de que sea en la Altillanura. Ahora, no todos los fertilizantes son traídos de Rusia y algunos ya están bajando sus precios porque no se está necesitando tanto como a principios de año que era cosecha”, dijo el directivo, quien además recalcó que el que es arrocero vive del arroz y por ende tiene que seguir sembrando.

Poor el contrario, Camilo Prieto, consultor del Instituto Latinoamericano de Liderazgo, dijo que la guerra está activando una crisis mundial de alimentos y Colombia no se está preparando para afrontarla; y Julián Villegas, experto en el agro, puntualizó que así haya un crecimiento en los costos de producción, no generaría un desabastecimiento en el Meta.

Pero advirtió  que, ante una posible crisis alimentaria, “el departamento no podría ser quien supla las importaciones de maíz, trigo y cebada que es lo que llega de afuera porque el Meta no produce granos”.

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Desde la Federación Nacional de Cultivadores de Palma de Aceite (Fedepalma), el director de Sostenibilidad, Andrés Felipe García, dijo a Periódico del Meta que la seguridad alimentaria se debe ver desde diferentes aristas. Por eso, desde el sector, lo que hacen es garantizar el abastecimiento a la población general.

“Permitimos que las familias tengan un ingreso digno y salgan del círculo vicioso de la pobreza. Por eso promovemos la generación de otros cultivos porque sabemos que en la actividad agrícola hay subidas y bajadas, entonces lo ideal es que cuando los pequeños productores tengan precios bajos en la palma, puedan tener otras alternativas de ingreso que al final les permite equilibrar su capacidad operativa”.

Aunque el director indicó que algunas personas deciden dejar de producir maíz u otros alimentos porque la palma les da mejores ingresos, “esto no atenta contra su seguridad alimentaria, por el contrario, se las mejora porque beneficia su poder adquisitivo”.

Sin embargo, Prieto, consultor del Instituto Latinoamericano de Liderazgo, manifestó que el Presidente que llegue debe explicar cómo será la atención inmediata ante una posible crisis alimentaria que podría vivir el país, “porque es un problema que debe ser atendido con transversalidad”.

Advirtió que durante la campaña no se reflexionó sobre el hecho de que Colombia no se autoabastece con la producción local como trigo, soya o el aumento en los insumos agropecuarios, sumado a la crisis climática y la guerra en Ucrania que, para él, crea unas condiciones como en la pandemia, únicas para el próximo mandatario.