El origen de los juegos más populares del mundo

Los juegos de cartas o de mesa son una de las actividades de entretenimiento más comunes cuando se reúnen familiares, amigos o conocidos en torno a una mesa. En la era actual, muchos de ellos han migrado a las pantallas ofreciendo muchas más posibilidades a los jugadores, como partidas online o el hecho de disputar una variante que no es tan popular como las otras. A modo de homenaje, y teniendo en cuenta la migración hacia las pantallas de hoy en día, repasaremos el origen de estas prácticas de ocio tan populares y que se han dado a conocer por todo el mundo.

Antes de entrar en materia, cabe comentar que este tipo de actividades lleva miles de siglos entreteniendo a la sociedad. Concretamente fue en la antigua Mesopotamia, alrededor de los 5.000 años antes de Cristo, que datan los primeros juegos de mesa. De hecho, aguantaron el paso del tiempo y dejaron constancia porque eran enterrados junto a las personas fallecidas para que tuvieran un recuerdo y les acompañaran durante la otra vida. Consistían de agujeros, unos círculos y unos pinchos y el objetivo era pasar por todos ellos trazando un circuito.

Juegos de gran popularidad: del ajedrez al mahjong

El ajedrez es seguramente el juego de mesa más popular del mundo. Se calcula que más del 70% de la población mundial ha disputado una partida en algún momento de sus vidas y que en la actualidad lo juegan regularmente 605 millones de jugadores, muchos de ellos a través de internet y las nuevas plataformas digitales, aunque también se disputan torneos físicos. Su nacimiento sigue siendo todo un misterio, aunque muchos lo ubican en la India en el siglo III a.C., cuando se quería reflejar una batalla entre dos ejércitos contando con los diferentes integrantes de un batallón, desde la infantería formada por peones hasta el rey y la reina.

Aunque se juega en el mismo tablero, las damas son una práctica totalmente diferente. Las piezas se mueven en horizontal y consigue ganar el que come más fichas saltando por encima de las del contrincante. Egipto dio vida a esta actividad, aunque fue en el viejo continente donde lo dotaron de la popularidad que goza en la actualidad. Parecido a las damas, destaca el go de origen chino con fecha de nacimiento como la del ajedrez. En este caso, se conquistan fichas rodeándolas con las propias y es considerada como la práctica con más alternativas de movimiento del mundo.

Sin salir de la influencia del gigante asiático, durante la dinastía Tang apareció el mahjong en torno al siglo VIII. Una de sus curiosidades más llamativas es que no fue hasta la aparición de internet y su entrada en los hogares que no dio un salto en popularidad fuera de la China. La modalidad original implica a cuatro jugadores y el objetivo es ir construyendo una combinación de fichas para conseguir el valor de puntos más alto posible. En la red se ha popularizado la versión en solitario, que consta en retirar parejas que presenten el mismo símbolo.

Las prácticas de casino viviendo una segunda juventud

Francia es uno de los fundadores de uno de los juegos de casino más populares del mundo, la “roulette” o “pequeña rueda”, como ellos lo conocían. Fue inventada en el siglo XVII gracias a un mecanismo creado por el matemático Blaise Pascal. Poco a poco fue saltando entre salones de juego hasta conquistar Europa y dar el salto a Estados Unidos. En la actualidad, la ruleta online se presenta en vivo y emulando la experiencia física de aquel entonces. Además, permite al usuario escoger entre varias modalidades, siendo las más populares las clásicas europea, francesa o americana.

Si nos pasamos a las cartas, seguramente el póker es la actividad más popular del mundo. Nació alrededor del año 900 y cuenta con varias teorías sobre qué país fue el inventor: franceses, alemanes, chinos, persas… Lo que sí que es cierto es que es un juego de apuestas, donde hay algunas cartas ocultas, que se debe jugar en comunidad y que cuenta con un amplio abanico de variantes. Entre las modalidades más practicadas, todas ellas disponibles en las plataformas digitales, destacan en el podio la Texas Hold’em, la Omaha Hold’em y la Seven-Card Stud.

Más claro está el origen del otro juego de cartas de los casinos y salones de juegos, el blackjack. Aunque su nombre se debe a los locales de ocio estadounidenses, su práctica se dio en territorio francés por el 1700. Nació como “vingt-et-un” y no ocultaba cuál era el objetivo: acercarse lo máximo posible al 21 con el valor de las cartas. En cada uno de los países se conocía popularmente de otra manera, como “la veintiuna” en España, pero finalmente se ha impuesto el nombre anglosajón. Aunque en la actualidad presente varias modalidades, la esencia sigue siendo la misma.

A pesar de que es mucho menos popular que los dos anteriores, el baccarat también tuvo su importancia en la historia del ocio. De origen francés, era habitual en los salones de la sociedad acomodada de la época y fue James Bond, del autor Ian Fleming, quien lo catapultó a la fama. En su objetivo y desarrollo se parece mucho al blackjack, pero aquí consigue la victoria quien consiga o se acerque lo máximo posible al número nueve. En la red todavía se puede encontrar disponible adaptado a las nuevas tendencias y en muchas ocasiones con un croupier real repartiendo las cartas.

Backgammon y adugo, juegos con gran historia

El clásico y muy  antiguo juego de backgammon, aunque el nombre pueda confundir a muchos, tiene como origen la Mesopotamia del siglo V a.C. Llama mucho la atención por la originalidad de su tablero, que enfrenta dos jugadores en una combinación perfecta de azar y estrategia. El objetivo es librar cuanto antes las fichas del tablero trazando un recorrido en el que se cruzarán con las del adversario. Como sucede en otros casos comentados en este artículo, gracias a la buena migración a internet está viviendo una segunda juventud.

Y terminamos con un juego de origen latinoamericano que resiste el paso del tiempo: el adugo, con raíces brasileñas y muy practicado en otros países. Llama la atención por su tablero abstracto y enfrenta a dos jugadores en lo que viene a simular una situación de caza. Un jugador cuenta con catorce fichas, conocidas como perros; mientras que el otro tiene solo una, el jaguar. El objetivo de los primeros es rodear la ficha solitaria, mientras que el del segundo es capturar como mínimo cinco perros. Desde hace ya algunos años, está dando sus primeros pasos en el campo virtual en forma de aplicación.