miércoles, 8 de mayo de 2024
Particulares Pico y placa Miércoles 3 y 4

La sombra de Chingaza II


La sombra de Chingaza II 1
RP
Redacción PDM

COMPARTE

La crítica situación de agua en Bogotá probablemente contemple la necesidad de retomar un proyecto, que perjudicaría seriamente al departamento.

Por: Luissa Fernanda Pérez

La crisis de agua que vive Bogotá por causa del Fenómeno de El Niño, ha despertado entre algunos expertos la inquietud de que la capital de la República piense en soluciones a largo plazo para el abastecimiento del líquido.  

Andrea Devis Morales, doctora en oceanografía y profesora de la Facultad de Ciencias Naturales de la Universidad del Rosario, al señalar que “los eventos relacionados con el Fenómeno de El Niño en el pasado han dejado importantes lecciones sobre la gestión del recurso hídrico y la generación energética en Colombia.

Los eventos de El Niño son cada vez más intensos y frecuentes debido al calentamiento climático global. Es necesario tomar medidas preventivas para evitar volver a situaciones extremas. Nos enfrentamos a retos climáticos cada vez más extremos y como ciudades debemos ser más sostenibles y resilientes“, afirmó la profesora de la Universidad del Rosario.

Es por eso que en estas circunstancias se desempolva un viejo proyecto denominado Chingaza II, el cual contempla otro embalse de abastecimiento que sería alimentado con el nacimiento de las cuencas hídricas del Orinoco, que son también las que abastecen al Meta y varios de sus municipios.

Este macroproyecto “tiene el 99% del área en la cuenca del río Orinoco, en las cuencas altas de los ríos Blanco y Negro, Guatiquía, Guacavía, Gazaunta, Gazamumo, Humea y Guavio, y el 1% en la cuenca del Río Magdalena“, así lo asegura el Plan Maestro de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá. “Bogotá le arrebata a la región 14 metros cúbicos por segundo (m³/s) al río Guatiquía y 2 m³/s al río Guayuriba. Con un metro cúbico de agua se puede abastecer un millón de personas“, explica Nelson Vivas Mora, miembro de la ONG villavicense Cabildo Verde.

Según las cifras del Observatorio Ambiental de Bogotá, en 2022 cada habitante de la ciudad consumió en promedio 79,69 litros de agua por día. Vivas agregó que reactivar el proyecto Chingaza II implicaría quitarle un metro cúbico más al Guatiquía y 5m³/s al río Upía, por lo que naturalmente se perdería más agua del Orinoco.

Lea: Así operarán las restricciones de agua para mejorar niveles de embalses en Bogotá

Una fuente cercana al proyecto, que prefirió permanecer anónima, explicó a Periódico del Meta que este proyecto se compone de tres opciones que buscan hacer una ampliación del sistema. El primero consiste en construir un tercer embalse dentro del Parque Nacional Chingaza, el segundo es una captación en la cabecera del Guatiquía, pero en las quebradas de San Juanito y dirigidas al embalse de Chuza, por lo que serían 2,5m³/s adicionales que entrarían al sistema Chingaza. Y el tercer componente es una obra llamada ‘Chuza norte’, que son obras de captación sobre la cuenca alta del río Guavio, es decir, el río Upía de 5m³/s.

Cabe recordar que Chingaza I aún tiene deudas con la región como, por ejemplo, la creación del sistema de alerta temprana sobre el riesgo de tener un embalse en la cabecera de Villavicencio. “No hay un Plan de Gestión de Riesgo en caso de que ocurra un evento similar al que nos asustó en el año 2011″, cuando una falsa alarma de una avalancha causó una estampida descontrolada de personas que intentaban salir de la ciudad, ya que la misma no está preparada para una situación similar, “no está claro aún ese tema de protección sobre la cuenca, el agua y Villavo“, dice la fuente anónima.

Para el experto, otra deuda que tiene Bogotá con el agua del Meta es que no hay ningún tipo de ayuda para contar con un Plan Maestro de Abastecimiento de Agua en Villavicencio que sea asesorado por la capital. “Esa empresa vende una cantidad impresionante de recurso hídrico donde sus únicos clientes no son solo los de Bogotá, sino también los municipios aledaños. A todo el mundo le vende agua, hay una inequidad en el uso de ese servicio ecosistémico“.

Con Chingaza II habría una intervención nuevamente sobre la región que no ha permitido equilibrar todo lo que ha sucedido con el primer proyecto, y que nuevamente estarían sacando razones de urgencia para desarrollar una iniciativa casi en condiciones similares de inequidad.

Escanee este código QR y conozca más de la opinión de expertos en este tema.

La sombra de Chingaza II 2


RP
Redacción PDM

Periódico del Meta realiza una reserva expresa de las reproducciones y usos de las obras y otras prestaciones accesibles desde este sitio web a medios de lectura mecánica u otros medios que resulten adecuados a tal fin. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin autorización escrita de su titular.


Entérese de toda la información


Conéctese a nuestras redes sociales