Los cuatro puntos de la “emputada” de Juan Guillermo Zuluaga (I)

Por Katherine Cruz y Jhon Moreno

En una reunión que sostuvieron esta semana autoridades territoriales y de presidencia en la capital de la República con el propósito de darle por fin una solución definitiva a lo que necesita el km 58 de la vía Bogotá – Villavicencio y los otros 134 puntos críticos que no están a cargo del concesionario llegaron a varias conclusiones.

Primero, el presidente de la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) informó que están revisando el tema legal para volver a incluir en el contrato de concesión los puntos críticos de la vía Bogotá – Villavicencio.

Segundo, se consiguieron del Fondo de Contención de la ANI 68.000 millones de pesos para atender los puntos críticos de la vía.

Tercero, se solicitará la creación de otro Fondo Nacional para atender contingencias futuras de esta vía en particular.

Cuarto, se deben esperar conceptos técnicos para ver si es posible reanudar la licitación del viaducto del kilómetro 58, suspendida la semana pasada por requerimientos técnicos relacionados con la licencia ambiental.

Jennifer Arias, presidente de la Cámara de Representantes, al finalizar la reunión del Puesto de Mando Unificado (PMU) indicó que “la próxima semana se realizará una visita técnica para lo referente con la estabilización de la montaña en el kilómetro 58, para tener no solamente el viaducto y esa obra definitiva sino una estabilización de la montaña para evitar tragedias”.

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Los cuatro puntos de Zuluaga

Luego de esa reunión del PMU en Bogotá, en donde el mandatario del Meta, Juan Guillermo Zuluaga, le dijo a la ministra de Transporte que el Meta “estaba emputado” por los constantes cierres de la vía al Llano y la falta de planeación para solucionar los puntos críticos, expuso cuatro puntos que según él podrían acabar de una vez por toda con los dolores de cabeza de la vía al Llano.

Explicamos cada uno de ellos y los contrastamos con algunos expertos y el mismo presidente de la concesionaria Coviandina, Ricardo Postarini Herrera, para ver qué puede ser realidad y que se quedará simplemente en el titular de los medios de comunicación.

• Tramo 1 con ‘Obras por impuestos’

  . Según Zuluaga, se necesita que “se autorice” construir la doble calzada del Tramo 1 mediante el mecanismo de ‘Obras por impuestos’, sin embargo, no se necesita ninguna autorización porque esto ya está previsto desde el año 2008 con la Ley 29230, que estableció el marco normativo para lograr la participación de la empresa privada en la construcción de obras civiles de impacto.

Lo que sí se necesitará son empresas que quieran invertir en una obra que supera los casi 3 billones de pesos: “en la actual coyuntura económica del país muy pocas empresas podrían financiar una megaconstrucción como esta. Las empresas que tienen obras por impuestos por lo general ven el impacto social en la región donde la construyen. Empresas con mucho dinero como Cerrejón o Cerromatoso, podrían hacerlo, pero no tienen ninguna injerencia en el Llano y no creo que Ecopetrol lo haga sola por el valor gigantesco”, dijo el exveedor de la vía al Llano, Giovanny Angulo.

Paradójicamente, agrega Angulo, quien podría hacerla sería el Grupo Luis Carlos Sarmiento, pues esa doble calzada daría mayor eficiencia a los tramos 2 y 3 que operan sus concesionarias. “Veo muy difícil que ese mecanismo sirva para construir el tramo 1”, puntualizó el exveedor de la vía al Llano.

• Puente de Chirajara esté listo en dos años.

Juan Guillermo Zuluaga explicó que se necesita en dos años terminarlo para habilitar los túneles, pero de acuerdo a la entrevista de Periódico del Meta con el presidente de Coviandina, Ricardo Postarini, (ver página 9), será muy difícil que esta obra se construya en menos de 36 meses: “Van adelantados los caisson que son bastante profundos, llegan a 50 metros de profundidad, que es bastante trabajo. Pero yo calculo, con lo que se tiene estimado, que son cerca de 32 o 34 meses más que va a demorar eso. No creo que en dos años alcance a estar”, dijo el ejecutivo.

• Solución al km 58.

Esta respuesta es la más coyuntural y muy compleja. Al cierre de esta edición se estaba a la espera de la reunión que definiría si la construcción del viaducto del kilómetro 58 necesitará o no licencia ambiental. Todos, incluso el mismo Gobernador, piensan que sí es necesario, pero la tesis del director de Invías, encargado de la obra, sostiene que con permisos ambientales sería suficiente.

Para Postarini, “las autoridades ambientales deben tomar en cuenta que es una obra de emergencia y acelerar todos los trámites; que ANLA y Corporinoquia se comprometan a sacar eso lo más pronto posible”.

No obstante, para Giovanny Angulo, el tema de si se necesita o no licencia no es un tema nuevo: “en una visita a Guayabetal hace dos años ya se conocía del problema si se necesitaba o no licencia ambiental. Se pidió celeridad a la ANLA que hacía parte del PMU y había 11 investigaciones en proceso que debían solucionarse. Particularmente creo que se necesitará licencian ambiental por el impacto y el costo de la obra. Se necesita trabajar sobre el río Negro, cambiar su cauce del río, hacer aprovechamiento forestal y por eso era importante definir el tema de licencia ambiental. Lo mejor era haber pensado el viaducto por la ruta de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo”, dijo Angulo.

Sin duda más de año y medio tardaría esta obra desde el momento en que se adjudique.

• Los 134 puntos críticos.

Para Juan Guillermo Zuluaga, será vital que el concesionario Coviandina se haga cargo de los puntos críticos. El presidente de esa concesionaria dijo que eso será una realidad a partir de la firma de un otrosí que permita financiar las obras mediante un fondo público de estabilización de la obra.

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