¡Pilas con “esa virosis que está dando”!

Es frecuente, por temporadas como la que atravesamos, escuchar cuando nos enfermamos de cualquier cosa: “debe ser esa virosis que está dando”.

Las virosis son más frecuentes, según Paulo Zambrano, jefe de Urgencias de la Clínica Medellín, en bebés y en niños menores, pero también pueden surgir en adultos. Los síntomas pueden ser muy variados, ya que esta infección puede ser causada por diversos tipos de virus, que la mayoría de las veces alcanzan las vías respiratorias o el intestino, por esto es común que los resfriados y las gastroenteritis sean llamadas virosis y sean las más frecuentes.

En ese orden de ideas, los síntomas más recurrentes en las virosis respiratorias son: congestión, estornudos, secreción nasal y tos, así como dolor de cabeza o detrás de los ojos y lagrimeo; y en las gastrointestinales, diarrea, fiebre y vómito, pasando por mareos y falta de apetito, dolor muscular y dolor en la barriga, algunas veces virosis respiratorias y gastrointestinales comparten algunos síntomas.

Zambrano indica además que el médico puede identificar las virosis basándose principalmente en los síntomas, especialmente cuando la persona no presenta ninguna otra sintomatología y cuando hay otras personas afectadas en la familia, grupo de amigos o en el colegio (en el caso de los niños) o en el trabajo (en los adultos), por ejemplo.

El tratamiento para la virosis consiste en mantenerse en reposo y fortalecer el organismo, para que el sistema inmune sea capaz de contrarrestar y eliminar el virus por sí mismo más rápido. Por lo que las recomendaciones normalmente incluyen beber muchos líquidos, especialmente agua durante el día, realizar una alimentación equilibrada y rica en nutrientes, así como evitar ejecutar actividades pesadas.

Además de esto, Paulo Zambrano, añade que en algunos casos el médico podría recetar algunos analgésicos o suero y aclara que no se requiere tratamiento antibiótico.

Es importante tener presente que, si se generan síntomas de deshidratación como ojos hundidos, piel muy seca y deshidratada, cuando la diarrea empeora o hay presencia de sangre en el caso de las virosis gastrointestinales; y cuando se agrava la tos o hay la sensación de falta de aire en el de virosis respiratorias se debe acudir a consulta, pero por lo regular las virosis pueden cuidarse desde casa.

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Además, como una última recomendación, el jefe de Urgencias de la Clínica Medellín indica que una de las mejores medidas para evitar contagiarse con una virosis respiratoria es el uso de tapabocas cuando se tiene conocimiento de que alguien cercano presenta síntomas o si se está contagiado para evitar propagar el virus.

Asimismo, pondera que el lavado de alimentos y de manos es muy importante para prevenir las virosis gastrointestinales ya que los virus pueden permanecer en muchas superficies, en la piel o incluso debajo de las uñas y llegar fácilmente al organismo, bien sea a través de la boca o por las vías respiratorias.