Campo | Palmicultores van por deforestación cero

Más de 800 personas y 45 organizaciones participaron del evento anual más representativo de esta agroindustria que ha traído desarrollo, legalidad, empleo y bienestar a varias regiones del país.

Por Valentina Mejía

Con el lema ‘Cosechando Historia y Sembrando Futuro’, el Congreso Nacional de Palma de Aceite, que reúne a la mayoría de palmicultores de las regiones productoras, regresó a la presencialidad luego de dos años de pandemia.

Este año, el evento fue desarrollado en el Centro de Convenciones Neomundo, en Bucaramanga, donde por tres días se debatieron temas en torno al futuro económico de la agroindustria y el desarrollo sostenible del sector.

De acuerdo con Nicolás Pérez Marulanda, presidente Ejecutivo de Fedepalma, el 2021 fue un año histórico para el gremio, principalmente en la producción que tuvo un record de 1.75 millones de toneladas de aceite de palma.

Lea: ‘El Gobierno que llegue debe reconocer el valor de la palmicultura’: Nicolás Pérez

“El valor de la producción superó los 7,7 billones de pesos y se consolidó como el primer renglón en exportaciones no tradicionales con un valor que supera los USD 660 millones”, dijo el presidente.

De acuerdo con estimaciones propias de Fedepalma, el sector logró una participación del 16% en el PIB agrícola nacional, posicionando a la palma de aceite como un sector clave en el crecimiento y recuperación de la economía colombiana en 2021 y motor transformador de la economía nacional para los próximos años.

“Hoy en día el cultivo de palma es el segundo más importante en términos de extensión, con cerca de 600 mil has sembradas, convirtiéndolo en el principal cultivo productor de alimentos del país”, precisó Pérez.

Deforestación

Una de las principales críticas que se le hace a este sector es la deforestación que ha causado en algunas partes del mundo. Durante el desarrollo del congreso, Andrés Felipe García, director de Planeación Sectorial y Desarrollo Sostenible de Fedepalma, aseguró a Periódico del Meta que el sector palmero no es motor de deforestación.

Según cifras del IDEAM, para el año 2018, el 0,2 por ciento de la deforestación del país estuvo asociada a palma, lo que demuestra, según García, que el impacto de estos cultivos es mínimo en comparación con otros países palmeros.

“La palmicultura colombiana es muy reconocida en el mundo por sus atributos de sostenibilidad, por encima de los demás competidores. Nuestro objetivo es llegar a 0 deforestación, por eso hay una cadena de suministro trazada para cumplir con estas proyecciones”, dijo el director de sostenibilidad.

Seguridad alimentaria

Frente a la seguridad alimentaria, son varios los que critican que el cultivo de palma de aceite es una amenaza porque podría estar generando un desabastecimiento en los próximos años, debido a la ocupación de tierras que terminan quitándole espacios a los cultivos frutales y demás productos de la canasta familiar.

Al respecto, García dijo que: “la seguridad alimentaria se debe ver desde diferentes aristas, no es que yo cultive exclusivamente lo que me voy a comer. Es garantizar el abastecimiento a la población en general. Lo que hacemos desde la palmicultura es permitir que las familias tengan un ingreso digno y salgan del circulo vicioso de la pobreza”.

Entérese: Inaugurarán Centro Experimental Palmar de las Corocoras, en Cabuyaro

Y agregó: “lo que se hace desde Fedepalma es promover la generación de otros cultivos porque sabemos que en la actividad agrícola hay subidas y bajadas, entonces lo ideal es que cuando los pequeños productores tengan precios bajos en la palma, puedan tener otras alternativas de ingreso que al final les permite equilibrar su capacidad operativa”.

Aunque el director indicó que algunas personas deciden dejar de producir maíz u otros alimentos porque la palma les produce mejores ingresos, “esto no atenta contra su seguridad alimentaria, por el contrario, se las mejora porque beneficia su poder adquisitivo”.

Entérese de toda la información a través del Fan Page de Periódico del Meta