Villavicencio continúa con expansiones ilegales

Invasiones en sectores de la ciudad, sumado a la compra y venta de terrenos para urbanizar ilegalmente sigue amenazando el crecimiento ordenado de la capital del Meta.  

La invasión a predios ha sido una problemática recurrente en Villavicencio; el nacimiento de muchos barrios, hoy legalizados, iniciaron como urbanizaciones o asentamientos ilegales.    

En torno a esta actividad se han formado bandas delincuenciales dedicadas a ocupar predios, sin embargo, hasta ahora no se conocían casos en los que incluso excombatientes de las Farc intentaran engañar a la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) para quedarse con lotes de particulares.

Al menos así lo conoció la Revista Semana, quien reveló que en la capital del Meta un grupo de presuntas falsas víctimas de las Farc busca apoderarse de un predio para urbanizarlo ilegalmente. 

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“Encontré que los códigos de las víctimas relatan hechos parecidos y que, aparentemente, tuvieron ocurrencia el 27 de octubre de 1999, en un predio denominado La Camelia, ubicado en el municipio de Villavicencio”, dijo el abogado Alejandro Carranza, en la denuncia que radicó ante la JEP y que prende las alarmas por la existencia de un ‘cartel de tierreros’, que quiere aprovecharse de las leyes que benefician a las víctimas. 

Esta denuncia, que aterrizó en la JEP, está en una disputa legal que iniciaron los herederos de la finca La Camelia y que lleva décadas en despachos judiciales. 

De acuerdo con la publicación, “el predio de 170 hectáreas fue vendido y luego revendido, con un problema mayor, en la mitad de esa pelea legal están las 1.500 familias que se asentaron en ese espacio tras la construcción de dos barrios”. 

De vieja data

La creación de urbanizaciones ilegales por invasión se ha dado en sectores como Ciudad Porfía, dividida por manzanas y en donde poco a poco se fue ‘normalizando’ el asentamiento, pero que jurídicamente no se registra dentro del estamento como una urbanización legal.

Otra forma de urbanizaciones piratas, se da bajo la construcción en terrenos o lotes de manera ilegal por parte de personas a quienes se les denomina “los tierreros”, que usualmente tienden a buscar familias de estratos bajos que puedan desplazar. 

De 2012 a 2015, cuando el entonces alcalde de Villavicencio, Juan Guillermo Zuluaga, combatió de frente esta problemática a través de jornadas de inspección en las 8 comunas de la capital del departamento, se lograron 7.000 procesos sancionatorios por esta índole. 

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“Eran personas sin licencia o que estaban construyendo en zonas sin respaldo para edificar. Detrás de esas urbanizaciones figuraban grupos de autodefensas, exparamilitares que amenazaban para que la autoridad no actuara”, dijo a Periódico del Meta, Germán Ayala, exsecretario de Control Físico en ese periodo administrativo.

Bajo la presión de muchos grupos ilegales como las Farc, cada uno con sus milicias, se ha ejercido poder para delinquir en diferentes partes; tierreros, según Ayala, patrocinados por grupos de narcotraficantes o autodefensas. 

Entre tanto, dichas extensiones de terrenos en las que muchas veces se venden proyectos de vivienda ilegales, se establecieron en sectores periféricos de la ciudad como el Rubí, La Reliquia y Ciudad Porfía, quienes además adquieren otras condiciones. 

“En el Ruby se abrieron muchos procesos, ahora es un barrio grande con algunas situaciones: al ser un barrio ilegal, no pueden invertir recursos y no tienen derecho a servicios públicos; consecuencias que se ven ahorita en todas las urbanizaciones que fueron creadas mediante invasiones o proyectos piratas. Para contrarrestar esto se necesita mucha autoridad”, precisó Germán Ayala, también magister en derecho administrativo.  

‘Problema complejo’ 

Actualmente, bajo la administración del alcalde Juan Felipe Harman, se han identificado 50 urbanizaciones ilegales en la ciudad, en sectores como Caños Negros, Porfía, Kirpas, Vereda Cecilia y Vereda la Llanerita. 

Así lo dio a conocer Diego Barbosa, secretario de Control Físico del Municipio, quien además reconoció ser un problema complejo para el desarrollo de la ciudad. “Una de las grandes problemáticas que tiene el suelo de protección, como los humedales, son espacios o puntos donde se está intensificando este tipo de urbanismos”. 

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De acuerdo con Barbosa, desde la mesa municipal, y a través las distintas entidades del Estado como la Fiscalía, curaduría y Cormacarena, se han sumado esfuerzos para combatir la problemática.

“Con el trabajo articulado con todas las dependencias e instituciones esperamos los mejores resultados. se ha propuesto un tipo de acción rápida cuando estén proliferando esas ocupaciones indebidas; coordinar con la policía dentro de las 48 horas siguientes para detener esa intención corruptiva y a partir de otras instituciones poder brindar algún tipo de acompañamiento a esas personas”, concluyó el secretario.

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