La “olla” del Popular sigue latente
- Publicado en Oct 29, 2022
- Sección Villavicencio
Las casas demolidas, que prometían acabar con la inseguridad y el expendio de drogas en este sector de Villavicencio, quedó solo en promesas.
En la calle 28 con carrera 12 del barrio Popular en Villavicencio no solo se derrumbaron dos casas abandonadas que eran utilizadas para el expendio de drogas, sino también las ilusiones de familias que con esta acción esperaban que cambiara el panorama de su barrio que por años fue catalogado como unos de los más peligrosos.
Aunque el 26 de marzo del 2021, Diego Molano Aponte, quien en ese entonces era el ministro de Defensa, llegó a la capital de Meta anunciando que “el mal no seguirá robando la vida de los jóvenes en Villavicencio”, tras la demolición de las dos “ollas” del microtráfico en este sector, el fantasma de la criminalidad volvió a acechar.
Periódico del Meta dialogó con Adriana Cétarez, expresidente de la Junta de Acción Comunal, quien dijo que “lo que se hizo en el Popular es algo inolvidable porque se demostró que sí se puede acabar con una olla que manejaba toda la parte económica del sector y que lo que falta es voluntad política”.
Sin embargo, precisó que después de eso no se ha realizado nada para recuperar dichos espacios demolidos y que nuevamente las bandas se tomaron este sector de Villavicencio.
“Nosotros habíamos pedido que se construyera un CAI en esos lotes para reforzar la seguridad y así seguir combatiendo el expendio de estupefacientes, habían anunciado también un salón comunal y que llegaría una estrategia del ICBF, pero finalmente no se hizo nada. El barrio está en retroceso”, manifestó la líder, quien fue desplazada del Popular a mitad de este año.
Puntualizó que la delincuencia se tiene que acabar mediante un trabajo real y de compromiso por parte de las autoridades. “Les quedó grande acabar con estas ollas, no es posible que las mamás tengan que ver todavía cómo sus hijos son consumidos por las drogas”.
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Y agregó: “por 12 años se hizo un trabajo muy valioso, se consiguieron cinco casas en extinción de dominio, de las cuales dos se demolieron, se capturaron 50 personas incluyendo a alias ‘El Patrón’, quien era el cabecilla, pero en dónde quedó ese esfuerzo”, aseguró Adriana.
Respecto al anunció que había hecho el Instituto de Bienestar Familiar (ICBF), sobre la llegada de ‘Sacúdete, un programa de promoción de derechos y prevención primaria enfocada en empoderar niños, niñas y adolescentes para afrontar las situaciones de la vida cotidiana y los riesgos a los que están expuestos, este proyecto finalmente no se ejecutó.
Fuentes cercanas al programa indicaron que infortunadamente esta estrategia no llegó al barrio Popular por las condiciones de seguridad. Aunque hubo reuniones con presidentes de junta y la misma Policía, ni siquiera ellos garantizaron el ingreso del talento humano para desarrollar estos encuentros.
Periódico del Meta se comunicó con Glenis Medina, secretaria de Gobierno de Villavicencio, pero no fue posible conocer su opinión sobre la problemática del Popular.
Los predios mal administrados de la SAE
Las críticas que ha tenido la Sociedad de Activos Especiales (SAE) por los malos manejos administrativos han sido escándalo. Incluso el presidente Gustavo Petro pidió abrir una investigación contra los anteriores directores de la entidad, para saber por qué no actualizaron el inventario de bienes en manos de esta entidad, que son decomisadas por dineros ilícitos y luego se destinan a la reparación de víctimas del conflicto.
Villavicencio no se escapa a las dudas que genera la SAE. La exsecretaria de Gobierno de Villavicencio, Andrea Lizcano, explicó a Periódico del Meta que finalmente la administración municipal no pudo hacer nada luego de que se demolieran las dos casas en el Popular ya que los predios le pertenecen a la SAE.
“El alcalde les pidió que se las dieran para construir un salón comunal, pero pusieron mucho problema. De hecho, una de las casas que está en extinción de dominio en ese barrio, la SAE ya la vendió”, dijo Lizcano, quien enfatizó que los procesos con esta entidad son demorados y muchas veces no resultan.
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Recalcó que después de eso se demolió otra casa en Brisas del Guatiquía y la “casona” que era un escondedero de “Jíbaros” en ciudad Porfía. “Allí actualmente se está construyendo un parqueadero que será para el complejo deportivo, ese predio sí se pudo recuperar porque era del municipio”, precisó la exsecretaria de Gobierno.
Lizcano aseguró que acabar con una “olla” del microtráfico no es fácil en la ciudad debido a todos los procesos judiciales que se deben desarrollar.
“Hay que dimensionar también la cantidad de investigaciones que debe hacer un policía judicial para que el Fiscal autorice el allanamiento del inmueble que, hoy, es una demora para que las den. Ahora, cuando entremos a la legalización eso no será un tema de persecución judicial y cada vez será más complejo acabar con esas bandas”, concluyó.
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