La vía a buenas noticias | Editorial

La entrega de la doble calzada Chirajara-Fundadores es una magnífica noticia para el Meta. Parece obvio mencionarlo, pero en medio de tanta narrativa perniciosa de los discursos en el país, es necesario destacar la finalización de un megaproyecto vial como este.

Se sabe de antemano que vendrán críticas por los costos de los peajes, la concesionaria, el manejo técnico del tráfico, etcétera, pero no podemos sesgar que la puesta en funcionamiento de esta vía era una necesidad apremiante para la gente llanera, que no solo disminuirá el tiempo de recorrido en su conexión con Bogotá, sino que el turismo y la agroindustria podrán beneficiarse también.

No es necesario tener conocimientos en ingeniería para intuir que la manera en que se estructuró esta obra necesitó de una inversión multimillonaria, una gran cantidad de material y mucho ingenio para esquivar los desafíos naturales de una cordillera, que poco colabora para que las vías la atraviesen. Todo eso no se hace con buenas intenciones sino con dinero y mucho.  

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Las críticas que recibieron las Alianzas Publico-Privadas (APP), modelo bajo el cual se construyó esta obra, terminaron siendo infundadas y el tiempo finalmente dio la razón sobre los lineamientos que debían tenerse en cuenta en estos contratos. 

Sino fuera con este esquema, ¿cuándo el Gobierno Nacional hubiera tenido 3,2 billones de pesos para iniciar, desarrollar y terminar este macroproyecto en un periodo de tiempo relativamente corto?

Seguramente estaríamos hablando apenas de una fase inicial, con escándalos de corrupción, parálisis de obras y errores de diseño: es decir nada distinto a como antes se desarrollaban las grandes obras de infraestructura de Colombia y estaban cargo del mismo Estado. 

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Amortigüemos esas voces díscolas que siempre critican, pero que igual reprocharían si los proyectos no se hubieran desarrollado. 

No podemos ser mezquinos a la hora de celebrar la entrega de esta construcción, así como el restablecimiento de las obras de la malla vial del Meta; de la doble calzada Villavicencio-Yopal y la Transversal de la Macarena, esta última una hermosa vía en medio de lo que fue un escenario de conflicto y ejecutada por el Ejército Nacional.

En lo que no podemos desfallecer, quienes nos interesa la región, es en presionar al Gobierno de Gustavo Petro para que saque adelante el proyecto de doble calzada en el Tramo Uno de la vía al Llano entre el Túnel del Boquerón y El Tablón. Hay una posibilidad de construirla mediante ‘Obras por impuestos’ pero la coyuntura económica prevé que no será fácil sacarla adelante.

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